Ese reloj es muy exacto
Gerardo Lino
ئ
Perdida en el
sillón de mi cuarto pienso en ti con mi mano...
Bebe
Un idioma muerto
ha cobrado vida
...
es toda una
campanada de caos
Antonio Rangel Reyes
La fusión de los
amantes va más allá de ellos mismos; traspasa los límites del bien y del placer
y del mal y del dolor; los mezcla, los vulnera, suprime sus oposiciones.
Andrea Barreto
Canción
Te quiero
—me lo dice en
unos tonos...
como si la lluvia
no mojara
como si se
empapara el sol
casi feliz y
entre triste
como si ya me
dejara
mas no quisiera
dejar
que se sepa
alguna vez
Te quiero—
casi como si
nunca me besa
rebañados los
ojos de agua
de rebañada agua
en la sal —niñez
Qué puedo medula
mía
si ya no sé ni
qué hacer
Amarla cuanto es
tan bella
morir sin querer
por qué.
En el monu
Esplendía el sol
sobre tu cara.
Soy malo para los
colores.
¡Color tan tuyo
esplendiendo en el sol de la mañana!
Cruda mañana
leve.
Soy malo para los
colores.
Pero tu cara: no
la viste —jamás.
(Fue hace una
hora)
¿De qué color son
tus ojos
entre el café de
los árboles
las ramas tiernas
del fresno
y los verdores
del sol?
Si en las
penumbras occiduas
se afilan de
plata oscura
y en la maldición
del mundo
destellos pardos
estallan
o en la risa y en
el éxtasis
fluyen las gamas
de sangre.
En esa mañana
húmeda
torneaban la
calidez de la luz
tu frente tus
mejillas y tus labios.
Ronda
Ronda
Placer de amar
Placer de ver jugar
Placer de oír cantar
—dichosa y triste—:
un día redondo
—y el verbo insuficiente.
Juegos
Arriba y abajo y hacia arriba yendo abajo
y corriendo río abajo hacia los límites
—Sí!
Y fuera de ellos, naturalmente —Ella.
Y en ellos, en los centros —Ambos.
Cante
Adheridos los labios cantándole a los
labios
“Te quiero ver noche y día
Te quiero de madrugá
Con pena y con alegría
Tranquila y desesperá.”
Cantan los labios de arriba
Adheridos a los labios de abajo
“Sólo vivo pa quererte
Y me tienen sin cuidau
Ni la vidya ni la muerte
Ni el presente ni el pasau...”
¡Haber oído ya un canto hondo!
¡Haber oído ya un canto hondo!
Orden del día
Tal vez,
caiga Somoza, amor
mío.
Haremos hoy la de
diospadrecomoanimales
nos iremos contra
la imposición.
“Te amo a madres,
y padres y
hermanos,
y la prole en
general!”
Nix Nox
Ahora
que ella
duerme
y el agua
sigue
cayendo
El péndulo
en griego canta
nix
Latino
responde
nox
Bajan
las aguas
caóticas
Pero
su canto
es único
Nixnox
nixnox
nixnox
En lo oscuro
respira
nix
En el agua
exhala
nox
Del péndulo
de las aguas
de su aire
Su sueño
tan sereno
su destino
Me es
vedado
saber
Qué
me depara
el día
Ese reloj es muy exacto
Ese plato que me
obsequiaste
sazón especia
corte delicado
lo quisiera el
aire para su voz
el surco para la
semilla
la mano para su
cerebro
los mosaicos para
su escoba
la paseante para
el albañil
y el albañil para
la joven
la cebolla para
su escarcha
el papel para su
lápiz
la niña para sus
mayores
el balón para el
descalzo
la ley para el
litigante
el ladrido para
su perro
la palabra para
el sentido
la tarde para su
aurora
las hojas para
algún árbol
la circunferencia
para su círculo
las travesuras
para los juegos
la carne para su
alma
el mártir para su
verdugo
el espíritu para
la letra
el cuchillo para
las frutas
la enamorada para
su amor
y luego la cereza
y el pastel / de ese perfeto día
El sucesivo
Si viene triste
Si con esplendor
se aproxima
Tan alto que
parezca inalcanzable
U hondo como las
aguas hondas del terror
Amaremos juntos y
cada quien en lo suyo
Ese lugar mutuo
—sus deseables variaciones.
Es y se
va
Aprovechar ausencias
is
Distorsiona el tiempo igual que
un papel de celofán
en las manos de un niño
—días-años/qué hora es/
qué largo es el invierno/qué
es/cómo
se nos ha ido el verano en una
noche
no existe el estío/siempre
estamos húmedos/
no habíamos...—
igual distorsiona el foco
por cerca por lejos por enmedio,
igual
distorsiona el sabor seco el
dulce lo picante
la sangre con los fluidos
ardorosos si no fluyen
como si nada se oyera distorsiona
la música
Nos hace oír lo inaudito —otravez
como si nunca
distorsionadamente tornados
ritornelos
siempre / no existe el día ni la
hora / hoy es
Torsiones de la lengua —esta y
las otras:
las de hablar las de besar—
signos inaudibles
jamás escritos sino con papilas
torciéndose
moluscos fósiles de moluscos
vueltos a vivir
Olores que ya no son de uno de
una de nos
distorsionando la lógica de la
ciencia
del buen comportamiento y la
palabra
decente consciente atingente
condescendiente
sino sinuosa distorsionada sin
nadie
a quien le importe lo entienda lo
huela
Ya de la piel las pieles labios
ni qué decir
los pelos y las uñas músculos
tendones
Es el distorsionador de la
mentada realidad
—unos dicen que es una diosa
otras dicen que será un dios:
comosellame
distorsiona y nos pone a coger y
amar
amar y hacer comodiosmanda: a ser
y bien derechos ya torcidos ya
perdidos
en la obediencia que nos tuerce
a dejar de estar abandonados
—luego ir a los demás
concomitantes—
a volvernos en el tiempo de los
cuerpos
retornos que ignorábamos —tornos.
Y el péndulo nos marca
el ritmo.
Otra ronda
Noche redonda
—qué dicha pasa.
Tatoo
Ni una sola línea de poema
Nada ni música sino tu piel
Cierto es que el tiempo trastorna los
significados
Trastorna todo tatuaje también
Píntate o no te pintes
Píntate o no te pintes
Es tu piel es tu piel
Definiciones
Ya te he dicho
que mi alma es mi cuerpo
Ya me has dicho
que tu cuerpo es tu alma
Ningún dualismo
vale:
Almamía soy tu
cuerpo
Eres mi cuerpo
Mialma
Cuerpomío
Tuyo ‑ ya
Largo
Largo inicial de
Jarret —mientras llegas.
—Debí conocerte
entonces —con tu hilo de voz.
(Años
adolescentes del Köln Konzert
años infantes de
jarana y piano son y jazz
años senescentes
en Paris Concert
o las últimas
improvisaciones nunca oídas.)
Quiséramos
habernos conocido antes
desde que
conocimos que nos conocemos
de tiempo atrás
de antes de nacer del todo —casi.
Nunca sabemos
cuándo hasta que ya.
Ahora sé
Amor entra en uno
Sale cuando
quiere
Nada tiene que
ver
Con los enconos
Ni con el odio
—Accidentales
individuos—
Muertos son
aquellos
A quienes Amor
dejó
Y puede volver a
entrar.
Resistencia de
materiales
Esto que te cuento
Al tiempo no le importa.
Fue en un tiempo que no es
—así es el tiempo: siempre es y no.
Crees porque lo lees
Que existe: no es de verdad
Solo es una runfla de palabras
Queriendo decir cuánto te quiero
Aunque quisiera decirlo como si nunca
Como si no estuviera desgastado por el
uso
“Solo te amo” —esto quizá lo entienda
quien lo dice
Esta querencia en que vives
Tan cierta como tu sístole
Apenas se puede decir
Amor excede las voces
Excede los cuerpos
Los significados
El tiempo
Y al tiempo
El tiempo no le importa
Cada día contigo es como tres
Se despierta de
una medianoche a mediodía
O agradece un
amanecer en plena tarde
A media mañana se
siente la madrugada
Y a la hora de
comer la mesa está desierta
Mientras la cama
congrega multitudes
O el sueño eterno
babea en el sofá
Sabemos y no
sabemos lo que hacemos
Suena el reloj
cada media hora
A veces con una
exactitud que espanta
Cuando acabamos
de acabar algo
Una frase / un
gesto descubierto
Un paso desnudo y
una risa descalza
A veces a
destiempo como una rara ave
No juntamos los
tiempos ni tejemos los días
Las noches ni los
minutos son nuestros
Mientras nos
contemplamos en ellas
O escuchamos en
la pared el tictac
Ido y venido ido
y venido
No sabemos y
sabemos de los días triplicados
Poligonales
dentro / de las afueras
En las bases de
las puertas y las ventanas
Examinamos
probamos corremos el tiempo
Corremos con él /
lo detenemos
Pregunte o no nos
pregunte
Ni el día ni la
hora
—y luego ni en
qué año vamos
Con y sin
El amor no se
escoge
Amor nos escoge
{De ahí que no
sepamos}
}De ahí el ya
saber{
El resto es
nuestro
{De Nadie}
Ya sabremos
}Duele{
Nada somos
Sin y con
Es
Desacato —la
dicha
Desacato —la voz
desafinada
Desacato —que sea
feliz como es
Son
Viene
pero no
de los instrumentos
la música
Así el amor
tan suyos nos
hace:
nos confunde
Que no somos sus
dueños
Que hemos de
servirle
Por esa forma
—espíritu
de nuestros
cuerpos—
sonamos cual se
debe—
Relato
Manejaba.
Ibas abrazando mi espalda.
Reíamos; estábamos contentos
—quizá la imagen de una pequeña nos
impulsa.
Te abrazo por la espalda.
En la opacidad había destellos coloridos.
Risas, frescura, calidez.
Te sigo mientras manejas.
Atrás de mí seguías
seguí atrás de ti
seguimos seguiremos: sonrientes y
acostados.
Sine die
La dicha eterna, ah:
Que me digas “Te amo”
Igual si te lo digo
Es una eterna dicha
Que duraría por siempre
Si para siempre fuéramos
Mas viene otra mañana
Urgida de escucharse
De la lengua al oído
Por mensaje por humo
Dímelo digo dices
Dame la vida eterna
Te amo: no solo hacerlo
Decírnoslo al instante
Y en el menor descuido
Sin hora señalada
Mañana tarde y noche
A menos que la muerte—
En acto
De las tantas cosas que nos hemos dicho
—Si la noche de anoche volviera —dijiste.
Irrecuperables en apariencia aisladas
—La Luna fue el pretexto —escribiste
otravez.
No hay una que no bulla sus sentidos en
nos.
(A las que se han depositado en estas
voces
alguien le presta oídos en este instante
y nos mira vivos después de una muerte
y hace que aquella noche vuelva
y coge a la Luna para ir por su amor.)
Alucines
A veces siento que ya estoy en tu casa
—en la de tu
mamá—
dichosos y
felices,
y que de pronto,
ay ansias,
mientras nos
cocinamos
nos barremos nos
ponemos
la mesa y nos
lavamos
la ropa —ella
llega
intempestivamente
—¡como si fuera
su casa!—
y nos desnuda con
su mirada
—nosotros, que ya
estábanos
desnudos hechos
nudos
—¡Ay, qué frío!
Mejor quédate
acá.
Quiero saber tus sueños
Las mujeres que
fueron,
tanto madres,
amigas, compañeras,
como las que
pudieron haber sido,
ya no digamos
nombres,
el hoyuelo en tu
mejilla tenían,
tu mirada
inquisitiva llevaban,
esa niña azorada,
esa vieja
del colmillo
adorable,
la joven sabedora
de carnes y de espíritus,
aquella madrugada
en tu ausencia me abrazaron.
Estoy bien.
Buenos días. Gracias por preguntar.
Ajuar póstumo
Guárdame luto los años que dure en mi
ropa
mi olor
—no moriré en olor de santidad—;
de esa manera seguirás viviendo.
Antes de disiparse todo rastro quizá
Amor vendrá a verte;
salúdalo si quieres: —Hola, don.
Ya entonces incinérala,
dale buen uso, sigue.
Feliz cumple
Ayer
mi mujer
me cortó la coleta
y me dio de comer.
Nada de cine ni nada de amigos
Me hizo exasperar por el fin del mundo
Del modo de trocarlo cual debería ser
Rio, dio, habló, contempló, extasió
Que bien me veo con el pelo así
—dice, besa: ¡que haga lo que quiera!
Odo
Nuestro olor muestra el ser
desde los orificios hasta la superficie
Por llegar al fondo del fondo
sondeamos sumergimos
Verduras ingeridas
Toxinas excitantes
Pone sus límites el alma
a través de su cuerpo
Ella nos da a probar de ella
del ser un poco acaso
Vapores de la carne
Dejos de sangre mineral
Sabemos que hemos sido
pero nunca del todo
Nos mueve el alma al cuerpo
Del cuerpo al alma vamos
Salivamos abrimos
Volvemos a probar.
Con ese beso tan
intenso
Ah: no vivas conmigo
Abandóname mucho
Dale vueltas al orbe
Vuélvelo revolotea revuélvelo
Ve y hazlo como quieres
Con tu calor tus labios
Vocéalo escúchalo camínalo
Hazle ver dale pellizcos abrázalo
Hazte bolas con eso
Que ya no se haga bolas
Déjalo dando vueltas
De su extrañeza ríe
Sobre ti misma vuelve
Recógete en tu tiempo
Y a tu antojo revuélveme
Hazme otravez tu mundo.
A pie y de la
mano
Caminar es bueno —escriben los
sedentarios.
Los nómadas caminan.
Pero ¿qué había en ese aire por donde
caminamos?
Cuantas cosas hicimos, los lugares
ocurridos, las conversaciones,
¿qué de ti y de mí tuvieron ese mediodía
ya tan nuestro?
¿Cuál afinidad nos hacía ir juntos sin
dificultades?
—¿Me amas aunque esté en una orden que no
es la tuya?
—Sí.
—Eres mi querencia.
Es bueno caminar y decirlo, cambiar de
aires, cantarlos.
Pero es un gozo inasible caminar junto a
ti.
Me agradará saber por qué o no saberlo.
Nuestro lugar es donde estamos juntos.
Soy feliz de que seas y ser contigo.
—Es la vida —dices, y te me lanzas con un
beso.
Diario
Avisa que viene una mañana luminosa. Y viene.
Se asoma por la reja —se ha acercado audaz—
y al mirar que es mirada baja la mirada llena de pudor.
Saluda comodiosmanda
pasa con la timidez de juanporsucasa conversa un minuto
y se deja tocar la muñeca.
Luego todo es confusión de labios atrevidos
manos temblando por explorar las pieles
por confirmar indagaciones —es cierto este rumor de pelvis
cierta la lucidez de los escritos
ciertísima la emanación de los sudores—
por encontrar lo ya encontrado de brazos adyacentes
ijares una curva hondísima en la región lumbar
salivas arriesgadas olores iniciados en su reconocimiento.
Han pasado noches y días a la velocidad de un instante.
Dice que no vendrá una tarde nublada. Y sí: no viene.
Entonces la casa comienza a llenarse de preguntas metódicas
de inquisiciones administrativas de cronicones momentáneos
y dudas insensatas.
Es el tiempo de poner por escrito aquello que aún queda en
la carne viva
los aceites que rezuman todavía sus vapores
las prístinas gotas de la esencia esparcida por los suelos.
En ese tiempo de cierta locura vuelven a florear
las puertas por donde puso las espaldas los sillones
indican con precisión científica el pliegue y su
nomenclatura
el modo en que la cabellera se posaba
volaba en un requiebro
cubría unos párpados idos a la exaltación de Santa Teresa.
Es el tiempo de San Juan en su celda.
Vuelve un día. Y el día vuelve con sus noches.
Quizá no se haya dicho nada de su voz
—nadie puede repetir esa voz en este oído—
quizá nada del tono de sus iris
—ningún ser vivo habrá de verlos al sol
o en la penumbra de la madrugada
ni en las indefinidas clarideces del ocaso en este ojo—
quizá nada —en absoluto—
de su tersura en el hombro en la planta en los resquicios de
sus senos
en el abismo lúmbico en el arranque de sus muslos en las
corvas
en la base de la cabeza por atrás de su oreja izquierda
—con este tacto con esta lengua—
ni sobre la herida de su vientre ni acerca de la forma
estricta de su vagina
ni rozando el ilíaco que aún se ríe
—no habrá nariz que recuerde sus variedades religiosas
sino ésta que firma de dedo y piensa en sus deslices
y sus delicadezas ahora que no está—:
pero no importa: ella vino
vio
y por el momento deja que esto se escriba.
“Seré tuya hasta que se te enfríe, digo,
hasta que te enfríes.”
Sería prolijo entrar en detalles
—es el amor su ausencia
su fraseo finido
su modo de cortar la carne
—es el amor su estar como si no estuviera
su irse como si se quedara
sus olvidos recordados a tiempo
sus recuerdos del deber para siempre extraviados
—es el amor su modo de ocuparse en las ociosidades
de rabiar por lo torcido del mundo
de apuntar con dedicado esmero lo que ha de venir
y lo que acaso ya no vino.
Vengo —exclama— y en la insensatez del tiempo viene
Voy —anuncia— y en la necedad del mundo viene
Vaya —sé— todo es cierto por una vez en este instante
incluso si no viene
Suena ya la campana de San Francisco media hora antes del
mediodía
—ya ha de venir
—los dejo.
Juris
Y aunque todo me niegue el
derecho
me aferro a este amor
Por tu amor sobreseo todos los litigios
requerimientos multas y sentencias
No hay nada verdadero en las palabras
Abogadastres atados a Roma
Revolucionarillos huecos de Ilustración
Poetecos imprecisos.
No hay una ley en mí:
Justifican mi ser tus códigos ilegibles
(Así sean éticos o caóticos.)
Ofrenda
Yema en tu minivagina —lo llamaste así.
Ahora que no estás.
Ahora que los muertos.
Cuando la recojas tráeme algo.
Cigarros tragos panes.
Incrédulo que soy!
Mundo patas arriba:
Vamos a jalárnoslas.
Hipóyesis
Por qué podemos decirle siglo a cierto
instante
y no decimos otro sitio para el piso que
pisamos.
Quizá
porque
por más cierto que sea
o haya sido
el amor no tiene lugar
—invade nuestros cuerpos
con nuestros cuerpos
irradia sus calores hacia el mundo
expande el universo, contrae sus
duraciones—
quizá
por eso
sólo su tiempo eterno ha de ser
El sucesivo
Si viene triste
Si con esplendor
se aproxima
Tan alto que
parezca inalcanzable
U hondo como las
aguas hondas del terror
Amaremos juntos y
cada quien en lo suyo
Ese lugar mutuo
—sus deseables variaciones.
Lectura
Buscamos el amor en los poemas
a ver si nos dan la cifra de la dicha
el secreto cierto para tenerlo al fin
Como si el amor no nos estrujara
entre el hallazgo feliz y la zozobra
los goces corporales y el miedo de la muerte
Ha de ser porque no lo conocemos
o queremos reincidir a pesar de nosotros
pues no ha de tener caso quedar solo en el tiempo
Y los poemas nos dicen sí no con y sin
que allá quizás o de tal modo el nunca jamás
la eternidad en sus contrariedades.
Puesto que no nos basta su querencia vacía
cerramos el libro y buscamos otro.
Relectura
¿Dónde estará ese verso
cómo decía
en qué libro lo habré visto
era tan claro
que hasta ya creí haber llegado
recuerdo haber sentido
su plenitud
O era una persona
acaso fue un lugar
de seguro un momento
Casi estoy en lo cierto
era algo parecido
o era el mismo
el preciso
amor
inextraviable?
Fraude de Freud
Toda la dicha del amor humano
Cantado por los poemas felices
Que sólo son los de los trágicos egregios
Puntual reflejo de la desgracia
De la desgracia de la humana vida
Que no está hecha sino de esperanza
Y otras maldiciones
Falsas entregas
Besos increíbles
Cogidas memorables
Pues la vida ‘humana’
Invento de la lengua
A pesar de la realidad
Que también la inventamos
Tanta es nuestra necesidad de un dios
De algo cierto y fiel
Cumplimiento de la felicidad
Me abandono a Ti
No me abandones
Y no sabemos si los dioses
Se burlan o
Qué dibalos
Están jugando con nosotros o
Como nosotros juegan
Maldadosos maléficos
Bromistas o sañudos
Pues somos uno al cabo
Los dioses y nosotros
Y los diablos—
Débiles de amor
Débiles de certeza
Urgidos de saber hasta lo falso
Antes mucho mientras casi a punto de morir
No queda otra cosa sino coger
A ver si Amor
Si
gue
es
co
gién
do
nos.
Todas las canciones de amor
Sí
Que dicen lo mismo
Desde el asombro del hallazgo
De la feliz mirada el roce coincidencias
Del soy tuyo soy tuya puto puta comosea
Hazme así hazme otravez hazme ser hazme algo
Y no me dejes y no me abandones y cuándo vendrás ya
vente
Lo mismo los poemas de amor
Dicen lo mismo quieren lo mismo ahg
Acaso con otra presteza talvez con su secreto
Diciendo sin decir y con unas ganas de ser o de haber
Sido lo que dicen que cantan esgrimen escanden pues
ser quieren
Prendados de la idea de que el ser se refugia en sus
voces en su espíritu
No hablemos de las pinturas
Tan solícitas al ojo y nulas de oído según
Que tantos trazos pinceladas botes de colores
Han intentado y hecho los mitos que nos fundan
Desde las líneas infieles hasta la desfiguración
perfecta
Y así la música
Que todo lo habrá dicho sin
Pensar sino escuchando los latidos
Prístinos de los navegares amnióticos
Danza en la noche oscura
En el mero día clarísimo llueva
O truene tiembla que dice su sentido
Sólo hay un ser y nada
Sería sin cantar mientras existes
“Oye”
Cinco meses y un año
Oh
cuánto tiempo
Oh
cuánto tiempo afuera de la casa
ya casi a punto de quedarnos
dentro —para ir luego —otravez!
hacia los otros —el mundo —y lo que sea!
Y quizá también como cerrarlos
Juarroz
A mí ya me cerraron los ojos
Sus palmas sobre mis párpados
Y al quitarlas
Veía ella mis ojos abiertos al infinito
Estáticos y ya no
Extáticos
Y emitió el agudo grito de la adolescente que es
Casi
Todavía y yo
Seguí con el juego
Hasta que sonrió
Sonreímos
Luego seguimos echados
Jugando
Sábado 81212
Te
le
van
ta
rás
des
pa
cio
pocoantesdequedenlastrés
Haz tu vida
hazla conmigo
hazle comoquieras
Desayunemos a media tarde
Veamos los deberes hablemos te escucho
Luchemos en la mínima parte que nos corresponde
Hagamos como lo hacemos sin que nadie más lo sepa
Si quieres saldremos a caminar a ver qué hay o dónde o
cómo
Luego alguna golosinita bancas fresnos niñas ilusorias
corriendo
Como quieras como siempre
Siempre dices que el siempre es el siempre
Habrá pelea
Sí, Mividya:
a eso de las diez y media de la noche
cierra boca cierra pierna cierra guarida y guardia:
Ve
conmigo
dejémonos
ver el enésimo
encuentro de Manny
contra Juan Manuel —y nos fajamos!
Contradanza
Ella me sacó a bailar
—y bailamos
hemos bailado
bailaremos—:
¿Para qué
habríamos de ir
a un baile
fiesta
tocada
reunión?
Seguimos bailando.
Fun
Con desparpajo
hablamos de mi muerte
Aunque al pedir
que repartas mis cenizas
Te niegas
A la tierra quieres llevarme
—y aquí no diré qué quieres
poner en conserva—
Hazlo como decidas
Tuyo es mi cuerpo
Ahora que respiras en mi oreja
Entonces cuando ese momento sea.
Indagos
Buscaba la verdad
Luego ella me encontró
También la buscaba
Intercambiamos hallazgos
Preguntas
Resoluciones que nos dan risa
Buscamos juntos
Y por su lado cada quien
Volvemos a decirnos
Qué rastros hallamos
Apenas damos con nada
Pero exprimimos la esencia
De poca cosa de misterios bobos
Dudas razonables y meras idioteces
Ajenas o propias
Nos tenemos
Entre ambos nos damos
Alcance
Tal ha sido nuestra Revelación y
cacería mayor.
Desafanes
—quebrada
roca, imprevisible musgo—
Rosa Chacel
Cómo puede ser
Extraño se siente estar en el mundo
En el tiempo largo en el tiempo frío
Se escurre la esencia se afantasma
No solamente por estar lejanos
Por estar —¡cómo es!— fuera de ti
Aparición
Trajinando con
mis suplicios
De haber
traspasado tus límites
Atenidos ambos a
dejarnos
Me asomo a la reja
abierta
Y te veo
sonriente y bajando los ojos
A la misma hora
de ese primer día.
Sonrío pesaroso
pues ya no pasarás.
Pero te Amo
No pierdas eso
Putear para
aclararse —quizá será bueno
A menos que
olvides en-el-medio:
Sólo la eternidad
de un amor:
Nadie sabe sino
Amor —cuan es tan bello—
Cuándo es o haya
sido
—sin su propio
cuerpo.
Spir
Viene tu aire
Me envuelve
Penetra
Sale
Viene tu aire
A ráfagas
Leves
A ratos
Viene tu aire
Sin ti:
Ah, ahg
Duele no
respirar.
Trágico es –o del humanum est
Desapareceré de
un golpe mis defectos
Para que sigas
amándome
Desapareceré por
completo.
En La Terminal
Estoy esperando
mi camión
entre el amor
y la muerte.
Tilde
Ponerla si se
quiere
sin una
ambigüedad: “Sólo te amo”
Quitarla si se
quiere
sin una
ambigüedad: “Solo te amo”
Que lo ambiguo
nuestro acento no sea
“Sola te amo”
Claridad tan sola
en las oscuridades solas
Oscuridad tan
sólo en las claridades solas
Ambos ambiguos
somos
Zambullidos en
aguas oscuras
Buceando por
buscarnos
Ya no en esos
tonos claros y ciertos
De la inocente
primera edad sola
Sino en el
deveras de los sólos o los solos
Celo inferno
Quisiera verte
dormida
en esta cama tan
tuya
—y no donde estás
ahora.
Asphyx
Traigo tus bolas negras detrás de mi
cabeza
No me veo
Por ventanales pulcros de aires enfermos
No me veo la nuca ni bien sin ti
Nunca fui suspicaz
Ahora sí pero no sé por qué
Negras me dicen casi al oído:
“No te hagas bolas”
Veo
Salgo al buen aire y respiro
¡Ay!
¡Cómo se parece la arena sobre la tierra
a la arena sobre tu cuerpo! ¡Ay!
Cambio de
estación
Al acabar la primavera venciste al fin
tu timidez y la mía.
Despertamos de madrugada y ya
había entrado el verano.
Ignorando cómo vino el otoño
hemos fundido todos los colores.
Sin importar lo que pinte el invierno.
Desasosiego
Escasas horas de un día sin verte
Esa distancia de pasar sin besos
De no escuchar tu risa inopinada
De oler tu cuerpo jugando en el pasillo
O el calor flotando de las sábanas
revueltas
Soportar el siglo vivo de un minuto
muerto.
Sin vivir
Imagino que mañana te espero
pero sin esperarte.
Qué clase de muerto he de ser
yendo y viniendo por el pasillo,
visitando la cama, contemplando la mesa,
saliendo a tomar aire, a fumar,
espiando los mensajes, escribiendo:
Qué muerte será esta de ser solo.
Qué vano habrá de ser el sol sin ti.
Quién es el que está muerto.
Quién eres que mañana no has llegado.
Antilolita
Espera que madure.
Espera que madure.
Espera que madure.
Espera que madure.
Espera que madure.
Espera que madure.
Espera que madure.
Espero que no muera.
¿“Vive”?
Vete al diablo
—cómo me dices eso.
Dondios me libre
de librarme de ti!
Pero sí, canto
contigo lo mismo
¡Agonizo sin tu
vida!
Métete esos
consejos de monja.
Es que tengo miedo
Tu futuro soy yo.
Tu futuro soy yo.
Tu futuro soy yo.
Tu futuro soy yo.
Tu futuro soy yo.
Tu futuro soy yo.
Tiembla.
—Mis conductos
respiratorios van al cierre otravez: huyen de ti.
—Enloquecí: el
único futuro es la muerte.
—Por esooo...
Culpa, ora
Qué convulsiones
engendra el amor
—el mío, el de mí
por ti
Soy contigo.
Me hago a ti — tu
conmigo por
libres
Y sin ti—
Ojeras!
Qué breve contigo
Qué largo sin ti!
No
habremos
de
separarnos
ya.
Quiero esa
lasitud de tu
“quiero vivir
contigo”
Pero—
Pres P
La Pereza hizo presa de mi cuerpo
La Poesía hizo presa de mi espíritu
La Putueza hizo presa de mi alma
Prescribo
Uno es el ser
Cuando digo que me duele la rodilla
o que en el brazo tengo comezón
¿ya por eso soy un dualista
vulgar?
Si digo que estoy mal pornosequé
—por que llegues, porque no vengas ni
por qué no quiero que te vayas y ya vete—
o si dices —sonriendo—: “mi dolor
es tu bienestar”
¿somos insensatos maniqueos?
Lo mismo debería entenderse del alma
de tu cuerpo sin mí, de mis ansias de tu presencia
de tus ganas de venir y venir y no llegar —o tarde.
Pues querida mía vida tuya
esas partes conque necesitamos decir las partes
sólo son las limitaciones de las palabras.
Somos uno
—ven!
Ig-i-tur
Gente humana, para volar nacida,
¿por qué con un soplido así se cae?
Purgatorio,
XII, 95-96
sopla la una
sopla el otro
desnudo el aire
tan puro de nos
piernas abiertas
sonreímos
tanto nos hemos
dado para buscarnos más
a cada risa voz
su voz le viene
nos medimos
después de no medirnos
doce labios ya
sin hablar nombramos
si tal cual escribiéramos
esta inverecundia
dirían que
plagiamos a Bukowski
y una vena de la
frente te salta de risa
leemos una de las
Cartas de Satán-Twain
dejamos el sillón
y nos vamos a la cama
allí seguimos
hasta ponernos a dormir
en la madrugada
límpida laxos más laxos
—ignaros del
volcán amenazante—
dos mosquitos
vinieron a rompernos del todo
no pongas el
veneno que me asfixia/así no puedo conciliar el sueño/
ni yo con los
zumbidos/duérmete ya ya déjalos/
no me dejan que
no/pon el veneno entonces/
ora no/ora sí
tanmaldormido en
la mañana pútrida
maltedesperté pues
se inició la gresca
en silencio te
fuiste con tus cosas
aire del juego
fuego del aire
airados seres que
viven del aire
y por nuestra
sangre vuelan
acaso enemigos de
Quien nos junta
quizá sus mensajeros
nuestros achaques
achaquémosles
no nosotros no
nosotros perfecto es Amor
luego de Abismo
la Tierra y su Abajo
según Hesíodo en
tus ausencias tan leído
como esos aires
íntimos tan nuestros
dejemos que nos
lleve
quizá nos llevó
ya
Pi al cubo
Amo como sea
—y cual debe: contra el mundo.
Por eso (supongo)
Veo que el mundo es bueno.
(De seguro algo hice.)
Veo que el mundo es malo.
(Porque no has aparecido
mujer de vida propia.)
Cómo conciliar lo que hago
con lo que quiero / lo que haces
con lo que dejas de hacer
conmigo
con lo que puedo hacer sin ti
con lo que no quieres hacer ni
conmigo ni sin ti o sola tú
con ganas o sin ellas
con sueños suaves
con agrestes entresueños
Seamos objetivos por una vez.
Bah: el mundo es mucho más
y mucho menos —ya sabremos
qué hacer —ya lo hemos hecho
dejar de hacer —ya lo dejamos.
Ni bueno ni malo: sólo es el mundo
transido de tiempo y de idioteces
de ganas de vencer el tiempo
de la muerte
ida
sinrazón
diseños entrañables
—de bicis de cuartos de cajones—
por los que anhelamos un diseño universal
—fallido todo
Dejemos estas cosas / hagamos que sucedan
contra las necedades luchemos
olvidemos el deseo en su placer:
no hay mundo si no apareces
ni vida propia ni tiempo sensato
ni ganas de vivir ni frustración perfecta
Pues al fin existes:
la muestra
del riesgo
de vivir.
Qué más hacer sino esperar a que llegues y me digas
cómo es—
maalhechoelmuuundoh
Luna y Júpiter en el cenit
A
ca
ba
de
dar
el
re
loj
las
do
ce
Cogien
doenelescritorio
Llegas
A tus
ayes
masaltos
Al
zolosojos
Ha
cialaventana
—Mira.
—Esa Luna es muy
exacta:
Ocho minutos
después:
—Sal a ver: Zeus
la sigue.
Luego lo llevas
de la mano
hasta que
desaparece:
—¡Qué cosa!
Converso
Mormón quiero
volverme.
Vivir en armonía
y luchar con cada
una y todas las mujeres
que alientan,
bullen, inspiran en ti.
Contradictoria
Si no fuera por
ellas
Quizá no te
amaría
A cada rato dices
sí dices no
Te contradices
sin decir a veces
Mientas los
contrarios y tan callando
Dices que ya o
que más y gritas porfavor
Entonces te
obedezco
Sigo tu sinrazón
Hacia dentro de
ti desde ti hacia ti
Ninguna falsedad
se aloja en esos movimientos
Estás siendo y es
una gracia asistir a tus gracias
Recovecos
manifestaciones aullidos confidencias de tu ser
Sí
No
Al rato
Quién sabe
Mejor otravez
Esta es la verdad
Tal es lo que
quiero
Más bien quién
sabe pero sí
O si no y si
acaso o mejor contigo
Tú dime no me
digas talvez deba ser sin ti
Quiero coger el
mundo de una sola vez pero no quiero
No hay mayor
lindura
Del vivir tu vida
por con y sin
De saber e
ignorar e reírse e plorar
E verte venir
como una témpera de Bach
Quizá no sería
contigo si no fueras tantas.
Lazos de la querencia
Puñado de sal
mezclado entre el azúcar.
...
Aún conserva
fragancia de promesas
la ropa que olvidaste.
Tsukuyomi Nikki
Todo es aire
común desde el origen
Mientras juntos
acá en la cocina o allá tú
En la cama sin mí
pues voy y fumo
Nada extraño
sucede
Voluptuoso el
instante en que ya no nos vemos
Se ha ido tu olor
desde hace horas
Impregnada la
casa de nuestro no sé qué
Se acrecientan
las ansias mientras nos cocinamos
Voluntad de
callar saturados de no vernos
De irse cada cual
a su cada cosa
De intentar ser
como si nada como si no existiéramos
Sino para ser
cada cual uno del otro sin ser de nadie
Sin ser uno del
otro sin ser para nada
Arraigados
íntimos se nos dan esos lujos
Embebido ando de
tu ausencia o de una peste
Si de pronto
quieres quiero queremos
Si alguien se nos
da
Si alguien se me
da se te da si quiere si no sabe
O acaso un rastro
del pasado quiere acabar su materia
Y la examinas le
das su vistobueno y ya
Mientras espero
que vengas por tu tache
O una figura en
pluscuamperfecto viene a mí
Y la examino y la
pruebo otravez o la repruebo
Nos ponemos en
celo
Bramamos
Quiero solo
contigo
No estamos solos
Vivamos ya
Todavía no
Seres extraños
claman hacia nosotros
Sin saber que
solo somos cada uno
Y a veces damos
oídos a lo que se preste
Lascivo regreso a
nuestras querencias
Nada de nadie
somos
Pues del universo
nos es suficiente nada
Quisiera que se
acabara este ir y venir
Y sé que si eso
pasa ya estaré muerto
Ven quédate
conmigo otro poco
Vivamos Juntos
Vente ya
Vuelve
No quiero
Tengo una vida
por delante
Tengo una muerte
por detrás
Vamos a
conciliarlas depravados
Busquemos otras
personas que sean gentes
Gente ya no sino
tu cuerpo
Tu alma en tus
gestos tu voz en mi lengua
Ven otravez
Sin ir a buscarte
sin esperar
Sigamos jugando
este ir y venirse de nuestro tiempo
Este tiempo que
se nos dio sin que sepamos cómo
Extrañarnos
también es un deleite
Y hay perras que
quieren morder a tu gatito
Y hay perros que
quieren morder a mi minina
Ve y haz no
tardes y tárdate
Hazme más tuyo
que nunca seré
Te haré más mía
que nunca serás
¿Juegan diosas
los dioses con nosotros?
Somos por eso
así: divinos por ser mortales.
Rayos—
Ya no necesito ni
siquiera el deseo
Vive allá vente
al rato cuando se te dé
Sufre mi ausencia
igual que sufro
Gocemos en la distancia
ese salobre sabor
Dejemos que nos
quieran que nos extrañen
Y ya cuando por
fin un día una noche después
O quién sabe si
ya nunca nunca se sabe
Recuerda de lejos
en tu aturdida extrañeza
Y en nuestra
intemperancia y en nuestra cercanía:
Que contigo me es
suficiente un cuerpo
Que sin ti no
habrá cuerpo que me baste.
{Ah: cambia la
lectura de estas cosas
si sospecho que
nunca ya será
o si de repente
apareces —sí!}
ئ
En
el cuerpo que se estremece mar adentro
y
en la sonrisa que delata pecados,
en
los ojos de amorosa lascivia,
en
nuestros cuerpos lubricados.
¿Quién
habita?
¿Quién
o qué nos crea?
Izah Sofía
ئ